¿Qué es el agua potable?

El agua que se considera segura y apropiada para el consumo humano se conoce como agua potable. Las autoridades sanitarias han creado criterios y normas que debe seguir el agua para ser considerada potable. Uno de estos requisitos es la ausencia de contaminantes en concentraciones que puedan ser peligrosas para la salud humana.

En el tratamiento del agua potable se suelen eliminar los contaminantes, productos químicos y bacterias que puedan estar presentes en el agua. La filtración, la desinfección (normalmente con la adición de cloro u otros desinfectantes) y, en determinadas situaciones, la purificación por ósmosis inversa u otras técnicas sofisticadas son técnicas de tratamiento habituales.

El consumo de agua es esencial para el mantenimiento de la vida y tiene importancia en diversos aspectos. A continuación, se exponen algunos de los principales argumentos a favor de la necesidad de beber agua:

La salud de las personas:

  • Beber agua es crucial para preservar la salud humana. La hidratación facilita una digestión saludable, la absorción de nutrientes y la homeostasis.
  • Es esencial tener acceso a agua potable limpia y segura para evitar infecciones y otras enfermedades transmitidas por el agua, como la disentería y el cólera.

La limpieza:

  • Lavarse las manos, bañarse y lavar la ropa requieren acceso a agua potable. Estas acciones son esenciales para detener la propagación de enfermedades.

Agricultura:

  • Una fuente fiable de agua limpia es necesaria para el riego agrícola, que garantiza la producción de alimentos. La seguridad alimentaria correría peligro si no hubiera acceso a agua limpia.

Sector industrial:

  • El agua se utiliza en muchos procesos industriales, ya sea directamente en el proceso o indirectamente para refrigeración y otras razones. Para que estos procesos sean sostenibles y eficientes, se necesita agua de alta calidad.

Ecosistemas:

  • La calidad del agua es esencial para que los medios acuáticos mantengan su biodiversidad. Los ecosistemas de los ríos y el océano pueden verse gravemente perjudicados por la contaminación del agua.

Para proteger la salud y el bienestar de la población, el acceso a agua potable limpia es crucial. Para asegurarse de que el agua potable cumple los requisitos establecidos, los organismos gubernamentales suelen vigilar y supervisar la calidad del recurso.